Heriberto Duarte
...
si hoy fuera a morir a media calle
y no pudiera ver más a mis amigos,
donde quiera que me sorprenda la muerte,
voy a ganarle un segundo de vida
para decirles a todos: benditos,
benditos sean, y gracias porque existen.
Jorge Ochoa.
Si hoy de pronto yo fuera a morir
quisiera que me hicieran una cumbia
para que mis amigos la bailaran
alrededor de una fogata
y de mi tumba
borrachos de recuerdo
con cervezas en oferta.
Para que a mi madre las trompetas
le quitaran media pena
y que miapá muerto de risa
acudiera por las calles
a mostrarle la canción a sus acoples.
Una cumbia cortita
simple
y que no mencionara mi nombre.
Incluso
si pudiera opinar sobre la letra
haría un mal chiste sobre morir por sorpresa
como las gatos ciegos
en las calles
y pediría que le echaran unas paladas de cal a mi alma
para que no la olfateen los perros.
Y que me avienten a una orilla
a la orillita del mar de Cortés
otra vez
y nos demos como nunca el último beso
sabor a sal.
Y volver cada que tanto
con la gracia del cencerro
a picarles las costillas
a los plebes en la esquina
desde una memoria mp3
conectada a una bocina
con foquitos de colores.
#CorazónDeCumbia