Cuando estaba terminando de escribir La Caída fui consciente de una cosa muy importante, necesitaría una portada.
La portada de la novelette era la primera portada que hacía, así que fue un proceso desde cero, tanto en ideas como en conocimiento. Como ya explicaré más adelante, La Caída iba a ser un ejercicio de escritura que no pensaba que llegaría a ver la luz. Por eso, cuando estaba en su fase final, empecé a agobiarme. Yo no tengo dotes artísticas, no sé usar apenas ningún programa de edición, sé lo básico.
Así que, cuando empecé las correcciones finales, entré casi en pánico. Comencé a mirar portadas de libros autopublicados, intenté buscar páginas donde pudiera hacer portadas, pero no entendía nada. Lo que me salvó fue hablar con conocidos del mundillo. Y es aquí donde entra nuestra estrella, Maider.
Maider es artista conceptual, de 2D e ilustraciones. Yo ya conocía su trabajo y, además, había beteado el relato y conocía los personajes y la historia, lo cual nos ahorró bastante tiempo.
Cuando le comenté a Maider sobre la portada, pues yo ya no sabía qué hacer, se ofreció a hacerla, ya que dijo que le vendría bien para algunos ejercicios de clase y así fue como empezó todo.
La idea fue lo más rápido: una escena del libro.
La saga VON tiene una estética muy clara, una ciudad abovedada, luces de neón, edificios altos y el característico color verde del VON. En general era una estética clásica del cyberpunk. Ambas sabíamos que eso era lo que iba a tener la portada, lo que ayudaría al lector a darle una idea de lo que podría encontrar. Serviría tanto para gente que viniera por mi o gente que se lo encontrara por Lektu sin tener idea de qué era.
A los edificios y a la bóveda Maider le añadió a los protagonistas en una escena que me pareció clave, la escena que empezó toda la saga. Haze y Less con la moto en la calle. Realmente no recuerdo si quería explícitamente a ellos dos y a la moto, pero creo que fue una idea genial.
Lo que más me gustó de la portada, y aún estoy agradecida a Maider por ello, fue que pusiera el letrero del Crazy In Love. Al principio la discoteca no iba a tener nombre, pero el letrero y que los colores de neón parecieran la bandera bisexual me gustaron tanto que bauticé al lugar así. Lo de los colores de la bandera fueron cogidos al azar y por eso la casualidad lo hace mejor, ya que quería que el relato diera visibilidad, y, además, lo escribí durante junio, el mes del orgullo, lo cual me hizo el triple de ilusión. Encima el nombre era perfecto, ya que la discoteca se caracteriza por esparcir en el ambiente una sustancia llamada K que en el lore de la saga inhibe los sentidos. Hace que la gente se olvide de sus problemas y, citando mi propia historia, se vuelva literalmente loca de amor allí dentro.
Así, con esta anécdota y la discoteca bautizada me di por satisfecha. Hasta ese entonces no era consciente de que el lugar fuera tan importante, pues en ella suceden muchos eventos importantes durante toda la saga.
La verdad es que Maider se guio muy bien sola, tanto en color como en composición. El resultado final es una preciosidad y a día de hoy sigue emocionándome como la primera vez que la vi. Ver un pedacito de la saga dibujado es una de las cosas más satisfactorias y realizadoras que me ha pasado nunca. Estoy muy agradecida con la facilidad que fue trabajar con Maider y el resultado final.
Aquí la tenéis para que podáis admirarla también.
Con la portada acabada, y yo ya mucho más calmada, sólo quedaba poner título y nuestros nombres. Esto fue un pequeño bache que conseguimos acabar con la ayuda de Liber, pues Maider nunca había tenido que usar tipografías y vimos que algunas de ellas tenía copyright y no podían usarse en algunos casos. Así, tras una noche de búsqueda y más ayuda por parte de Liber, conseguimos encontrar una fuente que nos gustara y con unos efectos que quedaran bien con la portada. Al ser en digital el efecto no quedaría como si fuera en físico, pues yo llegué a la conclusión que si fuera posible tenerlo en físico tendría un relieve inverso. Personalmente, me gusta mucho cómo quedó.
Aquí, entonces, vimos un problema. Nos habíamos centrado tanto en hacer una imagen bonita, que nos habíamos olvidado del formato normalmente usado para las cubiertas. Tras otra noche investigando vimos que normalmente las portadas de este estilo solían difuminarse para que el título destacara. Por eso parece que hay poco contraste entre portada y título, un error que no volverá a pasar.
Por lo demás, sólo nos quedaba poner mi nombre como autora y el de Maider como portadista y todo el proceso de la cubierta habría acabado. Para nuestro nombres optamos por una letra más sencilla y un color plano en la parte inferior.
Dado que es una portada para ebook y pdf no necesitaba nada más. Y creo que para ser mi primera portada, y la de Maider, pues se estrenó también conmigo, le quedó más que perfecta.
Por lo demás, como habréis visto en la meta de esta página, quiero que Maider también sea la que cree la portada para la segunda parte de la saga, y de la tercera y última, por supuesto. Ya hemos hablando sobre esto y hemos hablado largo y tendido sobre ellas. Mi idea es que las tres portadas representen la esencia de cada parte de la saga, usando el estilo tan característico y bonito de Maider.
Por lo demás, espero que os haya resultado interesante el post y que hayáis disfrutado leyéndolo. Si tenéis alguna duda, recordad que podéis comentar en este mismo post o directamente hablarnos por Twitter.